Decaf Wallet: Inclusión al sistema financiero

A medida que el tiempo avanza y la tecnología evoluciona, también resulta necesario aumentar la inclusión en el sistema financiero de América Latina. Como señala El País (2024), "de acuerdo con la base de datos Global Findex del Banco Mundial, el 73% de la población adulta es titular de una cuenta en la región de Latinoamérica y el Caribe". Esto indica que todavía un 27% de la población adulta sigue fuera del sistema bancario en la región, sin mencionar que dicha cifra resulta ser más pronunciada en áreas rurales, donde las instituciones bancarias y financieras, tienen poca presencia.

Por ello, los proyectos que se enfocan en resolver estas problemáticas, no solo a nivel de inclusión sino además de acercarse a zonas donde el sistema tradicional no llega, o tiene poco alcance, resultan ser indispensables en la actualidad. Es así como Decaf Wallet, que nace de una necesidad de pagar café con cripto, de allí su nombre, se convierte en un agente que busca resolver desafíos para una banca más inclusiva en Latinoamérica.

Decaf Wallet permite que cualquier persona con acceso a internet, pueda enviar, recibir y manejar monedas estables (USDC) de forma sencilla a través de su aplicación. Esto es posible sin tener conocimientos básicos o técnicos de blockchain, ya que a través de su registro simplificado no es necesario gestionar claves privadas desde el inicio. Se puede acceder con Google, lo que elimina una de las barreras más importantes del mundo cripto: el riesgo y complejidad inicial asociada a la gestión de frases semilla.

Es importante resaltar que Decaf es una billetera (wallet) de auto custodia. Es decir, los usuarios son responsables de sus activos, ya que no gestiona ni actúa como intermediario, sino que funciona a través de la blockchain de Solana y Stellar. No exige verificación de identidad conocida por las siglas KYC (Know Your Customer), al momento del registro. Además, Google o el correo electrónico actúan como una llave de acceso para asociar la billetera a un método de recuperación, y este método no almacena datos personales.

Entonces, cualquier usuario puede recibir remesas, pagos de servicios, e inclusive, abonos de salarios mensuales por trabajos realizados en su billetera Decaf, por medio de la red de Solana o Stellar, en moneda estable (USDC).

Sin embargo, su mayor atributo resulta ser la conexión que realiza entre el mundo de las finanzas descentralizadas y el sistema financiero tradicional. Todo esto gracias a la alianza entre Stellar con MoneyGram que le permite facilitar el acceso al efectivo y el envío de dólares desde la billetera a cuentas en EE.UU., así como convertir moneda estable a moneda local mediante pasarelas de pagos y los bancos en diferentes países de Latinoamérica.

Aun cuando Decaf Wallet permite crear una cuenta sin necesidad de verificación de identidad (KYC), es importante enfatizar que el acceso a los servicios anteriormente mencionados requiere pasar por un proceso de verificación a través de MoneyGram y las entidades bancarias. Esta exigencia corresponde exclusivamente al cumplimiento de regulaciones internacionales de prevención de lavado de dinero y financiamiento del terrorismo, estándares que deben ser respetados por las entidades bancarias y por los proveedores de servicios de transferencias internacionales.

Al mismo tiempo que facilita el acceso a los servicios financieros tradicionales, Decaf Wallet también permite a los usuarios adentrarse en el ecosistema DeFi, siglas en inglés para Decentralized Finance, de manera sencilla y segura. Esto es posible gracias a su nueva integración con Lulo Finance, una aplicación descentralizada en el ecosistema de Solana que permite generar rendimientos en moneda estable. De esta forma, Decaf Wallet no se queda únicamente con enviar y recibir, sino que también le permite a sus usuarios rendir sus activos.

Esto representa una oportunidad significativa para las personas en Latinoamérica, donde los productos tradicionales de ahorro y rendimiento suelen ofrecer tasas de interés bajas, estar limitados por barreras bancarias o por ubicación geográfica al mantenerse alejados de las ciudades.

Estas innovaciones no solo abren nuevas oportunidades de ahorro y rendimiento, sino que transforman realidades en comunidades históricamente excluidas del sistema financiero. Un ejemplo de ello es la comunidad rural de San Francisco, en Colombia, donde un grupo de mujeres pudo acceder a empleos como asistentes virtuales, y recibir su salario a través de Decaf Wallet. Con ello no solo lograron acceder al sistema financiero tradicional, sino también la posibilidad de ahorrar y planificar su futuro financiero.

El testimonio de Laura, quien expresó: "En San Francisco, Colombia, nunca se había visto que se generarán tantos empleos, y mucho menos para un grupo de mujeres", es una muestra de que, con las herramientas y soluciones adecuadas, es posible superar las barreras del sistema financiero tradicional.

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