Banco Galicia: "Las criptomonedas no son productos sustitutos, son parte complementaria de la banca tradicional"
En conversación exclusiva con LatamBlocks, desde la institución financiera dieron su visión respecto a las criptomonedas en Argentina.
Ariel Sánchez, Gerente de Productos de Inversión del Banco de Galicia de Argentina, descartó que las criptomonedas sean una amenaza para el modelo bancario clásico. A la espera del guiño regulatorio, el banco se prepara para un futuro donde pesos, dólares y tokens convivan en una misma plataforma. “No lo veo como, como productos sustitutos, sino complementarios para lo que llamamos la banca tradicional. Entenderemos que es parte de la evolución de la banca”. Con esta afirmación, Sánchez, marcó la postura de una de las entidades financieras más importantes de Argentina frente al avance de la economía digital.
En una entrevista exclusiva con el equipo de LatamBlocks, Sánchez analizó el rol que jugarán los activos digitales en la cartera de servicios financieros y recordó el breve pero significativo paso del banco por el mercado cripto, antes del freno regulatorio.
La integración como respuesta a la demanda del usuario
Para el gerente del Galicia, la dicotomía entre "dinero fiat" y las "criptomonedas" es una barrera artificial que no refleja las necesidades reales del consumidor financiero moderno. Según su visión, el futuro de la banca pasa por la unificación de experiencias.
«Vemos una banca hacia adelante en el futuro con productos cripto, con activos digitales, con localización de activos, pero complementando a la banca tradicional», proyectó Sánchez.
El ejecutivo fue gráfico al describir el comportamiento del usuario: «Los clientes no se levantan a la mañana y dicen: "Hoy quiero banca tradicional, mañana quiero cripto", aseguró que “quieren en sus plataformas, en las plataformas que confían todos los días, que utilizan a diario, poder pasar de pesos a dólares, a cripto, a stablecoins». Para el banco, el desafío reside en «encontrar soluciones que satisfagan las necesidades de nuestros clientes» en un solo lugar.
El obstáculo regulatorio y la experiencia de 2022
La relación de la banca argentina con las criptomonedas tuvo un punto de inflexión en mayo de 2022. Banco Galicia fue pionero al habilitar la compraventa de estos activos, una iniciativa que duró apenas 72 horas antes de ser bloqueada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA).
“En mayo de 2022 tuvimos nuestra experiencia. Estuvimos en producción durante tres días hasta que nuestro regulador decidió no acompañarnos en este desafío”, comentó Sánchez. El ejecutivo hizo referencia a la normativa que cortó de raíz la iniciativa: “El regulador emitió la comunicación 7506, el 5 de mayo de 2022, que inhabilitó al sistema financiero en su conjunto para poder, eh, realizar compra, venta y custodia de los activos digitales, entre ellos, las criptomonedas”.
A pesar del revés, Sánchez califica aquel episodio como una “experiencia sumamente enriquecedora” y aseguró que el trabajo interno no se ha detenido. “Seguimos trabajando, pensando y explorando distintos casos de uso, porque estamos convencidos que en algún momento nuestro regulador, eh, nos va a permitir volver a hacerlo”.
¿Luz verde en el horizonte?
Durante la entrevista le consultamos sobre si visualiza un cambio en la postura oficial que permita el reingreso de los bancos al ecosistema, Sánchez se mostró optimista sobre una apertura gradual.
“En distintas conversaciones con el regulador, ellos manifiestan que todavía no es el momento, pero sí, tienen intenciones de que los bancos podamos volver a optar a activos digitales”, reveló.
Sobre los plazos y la forma en que esto podría materializarse, el gerente sugirió un esquema escalonado: “Quizás, en etapas, quizás podamos empezar con la comercialización de activos digitales. Para en una segunda etapa poder volver a ofrecer a los clientes la compra, venta y custodia de criptomonedas”.
La declaración deja en claro que la banca tradicional no está dormida frente a la revolución digital; por el contrario, aguarda en la línea a que el marco normativo se alinee con la realidad del mercado.
